Actualmente, la marihuana se posiciona como una de las plantas más conocidas y consumidas, conocida también como Cannabis. Los fines de su consumo son muy variados, sin embargo, entre todos sus usos destaca principalmente el terapéutico. Esto se debe a que esta planta posee muchas propiedades medicinales, ideales para nuestro organismo. Pero debemos tener en cuenta que en muchas regiones el cannabis sigue siendo ilegal, por ende, en algunos casos se requiere una receta médica específica para su consumo. Cabe destacar que esta planta posee unas semillas que, a primera vista, pueden parecer bastante, pero dentro de sus cáscaras conservan un potencial de variedades muy grande. Hoy en día puedes comprar semillas de marihuana online sensoryseeds, de una forma fácil y rápida. Para que conozcas mucho más sobre este tema antes de realizar cualquier compra, a continuación, hablaremos sobre algunas curiosidades de las semillas de cannabis ¡Continúa leyendo!
Tal y como te lo puedes imaginar, las semillas de cannabis son comestibles y traen muchos beneficios para nuestra salud. Estas semillas contienen una enorme fuente de proteínas además de tener un equilibrio casi perfecto de ácidos grasos esenciales para nuestro cuerpo como, por ejemplo, omega 3, 6 y 9. Debemos tener en cuenta que dichos ácidos grasos son esenciales para la salud humana y, además, nuestro cuerpo no los produce por su cuenta.
No existe alguna diferencia a prima vista entre las semillas de cannabis regulares, las semillas autoflorecientes, las feminizadas y las semillas utilizadas para el cultivo de cáñamo industrial. Debido a esto, debes intentar adquirir tus semillas favoritas a través de un banco de semillas con una gran reputación, de esta forma, podrás tener una mayor seguridad y confianza en la compra que realices.
Los científicos afirman que las semillas de cannabis más antiguas conocidas hasta ahora datan de hace 2,700 años, aproximadamente. Cabe destacar que estas semillas fueron encontradas en una tumba en China, en el año 2007. Nosotros los humanos, como especie, tenemos una relación con el cannabis que se remonta hace miles de años atrás, a pesar de que sea algo impresionante y cueste de creer; además, aún faltan muchas cosas por descubrir relacionadas a dichas semillas.
Las semillas de cannabis suelen tener unas dimensiones muy similares al de la cabeza de una cerilla. Esto es algo que puede variar dependiendo de la variedad de la semilla: puede ir desde el tamaño de una semilla de tomate, hasta el tamaño aproximado de un guisante. Sin embargo, debemos entender que el tamaño de las semillas indican la vitalidad o el propio tamaño de la planta de cannabis que germinará a partir de la misma.
Una sola planta de cannabis que se produzca a partir de una de estas semillas, puede llegar a producir, posteriormente, cientos de semillas de cannabis. Todo esto, en función de su eficacia en la polinización y de su tamaño final. Algunas de las variedades de cáñamo se desarrollan para optimizar la producción de semillas cuando estas mismas pertenecen a la cosecha principal, por mencionar un ejemplo, para su utilización como fuente de alimento.
En muchas partes del mundo, la posesión de semillas de cannabis es un tema legal, esto se debe a que, habitualmente, dichas semillas no poseen THC, mientras que su cultivo sí se castiga. Por tanto, muchas personas amantes de estas semillas se ven en la obligación de comprar y conservar estas semillas como un objeto de colección, con la esperanza de que algún día la legislación de su región cambie y acepte legalmente el cultivo casero de cannabis.
Científicos y especialistas afirman que la mejor temperatura para conservar las semillas de cannabis va desde los 5 hasta los 7 grados centígrados. Esta suele ser la misma temperatura de fuera del frigorífico de nuestra casa. Además de esto, se debe mantener a las semillas de cannabis en un estado completamente seco; esto nos permitirá evitar el moho además de que germinen antes de tiempo.
Las semillas de cáñamo, en algunos casos, son utilizadas en la alimentación de los pájaros. Y desde hace algunos años existe una leyenda urbana que cuenta la historia de cosechas accidentales causadas por alguien (mayormente abuelitas), que luego de vaciar el plato de comida de los pájaros que suelen tener en su jardín, al cabo de unos meses, se encuentran con un arresto a causa de las plantas en floración que estaban cultivando aún sin saberlo. Como lo hemos mencionado, esto es una leyenda urbana que aún no se ha confirmado, pero es curioso saberlo.