A pesar de las intensas lluvias que se han registrado en los últimos días, estas precipitaciones todavía no han sido suficientes para compensar el déficit que se arrastra en la ciudad si hacemos un balance de todo el año con respecto a lo que es habitual. “Si se cumplen los pronósticos en lo que queda de mes y enero, se eliminará el déficit, que por el momento es todavía del 18%”, explica Francisco Infante, delegado de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) en Galicia.
Aún así, Infante admite que el otoño si que ha sido una estación lluviosa, con unos registros de 374 litros por metro cuadrado, que sirven para atenuar, al menos en parte, los efectos de un año que hasta esta estación había sido muy seco.
“La sequía agrícola ya está superada, pero la sequía hidrológica, que tiene que ver con al agua de los ríos o el agua embalsada, requiere periodos de tiempo más largos”, explica Infante.
“El otoño fue muy cálido en A Coruña, los tres meses, entre septiembre y noviembre. Aunque los otoños más cálidos fueron 2006 y 2014, si tenemos en cuenta los registros de este siglo”, añade Infante sobre la situación meteorológica de la ciudad. Se espera que el próximo trimestre sea también “más cálido de lo habitual”.